El verano en la Costa Brava y el Pirineu de Girona
La provincia de Girona, con sus destinos turísticos Costa Brava y Pirineu de Girona, cuenta con todos los elementos necesarios para ser descubierta e intensamente vivida por todos aquellos visitantes que deseen experimentar, en un espacio amigable y abierto al turismo, la tierra de Dalí, con sus escenarios vitales e inspiradores, una cocina vanguardista y tradicional, y la realidad actual de su capital, Girona.
Paisaje y luz mediterránea
En el imaginario de muchos, la Costa Brava se identifica por sus 245 playas de arena blanca y por sus pequeñas calas rodeadas de vegetación y acantilados rocosos, las cuales se extienden desde Portbou hasta Blanes, a lo largo de 220 km de costa.
Con pueblos de litoral como Calella de Palafrugell, Begur o Cadaqués, y poblaciones turísticas de ocio como Blanes, Lloret de Mar, Tossa de Mar, Platja d’Aro y Roses.
Y el Pirineu de Girona, rozando la costa, se presenta como un espacio de interés natural para explorar y descubrir en todas las estaciones del año. Poblaciones de interior y montaña con un sólido poso histórico, como Besalú, Ripoll, Camprodon y Llívia, otorgan a este fragmento de los Pirineos catalanes orientales un atractivo especial.
Tierra de raíces y genialidad
Los pueblos medievales de Peratallada, Pals, Peralada, Madremanya, Monells, Santa Pau y Beget son conocidos por sus recintos medievales excelentemente conservados, con interesantes edificios y elementos arquitectónicos y escultóricos en ventanas, arcos, pozos y casas.
El viajero no se puede perder el Triángulo Daliniano, integrado por el Teatro-Museo Dalí de Figueres; la Casa-Museo Salvador Dalí de Portlligat y el Castillo Gala Dalí de Púbol, que anualmente reciben la visita de cerca de 1,5 millones de visitantes.
Y para el visitante amante de la cultura no podemos olvidar los 24 museos de temática variada, la creación contemporánea, las ferias y mercados, los festivales de música y las fiestas tradicionales cómo la Cantada de Havaneres de Calella de Palafrugell, el concurso de fuegos de artificio de Blanes y fiestas patronales, que también convierten este territorio en un espacio único.
Territorio de estrellas Michelin
La provincia de Girona es bien conocida por su gastronomía y por poseer catorce restaurantes que suman 18 estrellas Michelin, entre los cuales se encuentra el mejor restaurante del mundo 2013 y 2015 según la prestigiosa revista británica Restaurant, El Celler de Can Roca de Girona. Para los aficionados al enoturismo, la Ruta del Vino DO Empordà presenta un viaje al mundo del vino ampurdanés y su zona.
365 días de actividad y diversión
Para el visitante más aventurero y activo, una buena manera de descubrir la Costa Brava y el Pirineu de Girona es practicando actividades como el senderismo, el cicloturismo –vías verdes-, el ciclismo de carretera o montaña, la náutica, el salto en paracaídas, salidas en globo, excursiones a pie o a caballo por los senderos señalizados, campos de golf en plena naturaleza y vuelos en parapente, escalada y descenso de barrancos, entre muchas otras.
Oasis de naturaleza
Ocho espacios naturales protegidos como el Cap de Creus, la Zona Volcánica de la Garrotxa, el Montseny, el Montgrí, islas Medes y el Baix Ter, entre otros, son una red de naturaleza viva que ofrece una amplia gama de servicios así como la posibilidad de llevar a cabo una gran cantidad de actividades guiadas.
En cuanto a alojamiento, en la provincia de Girona se pueden encontrar todo tipo de opciones, desde la oferta hotelera convencional, en la que destacant los pequeños hoteles de tipo familiar y con encanto, los hoteles de vacaciones y los establecimientos situados en primera línea de mar, hasta el turismo rural, los apartamentos turísticos o los campings.
Un viaje a la Costa Brava y al Pirineu de Girona se traduce en fuente de vida y salud, de enriquecimiento cultural, de ensoñación culinaria y de exaltación festiva para los visitantes que buscan historias emocionantes y experiencias memorables.
Para más información: www.costabrava.org